Voy a aprovechar ese momento antes de quedarme inconsciente sobre la cama para contaros la vergüenza que pasé alquilando en @amazonprime #50sombrasmásoscuras y por supuesto haceros el resumen.
Y bueno pues la película empieza con Anastasia en su nuevo puesto de orientadora en un instituto del MEDAC con otro jefe de estudios un poco guapo pero en rubio y en despeinado y en APARENTEMENTE menos psicópata que el anterior.
Ella por supuesto de bajón porque sigue locamente enamorada de Cristian aunque lo disimula súper bien mirando al vacío en el autobús, confundiéndolo con todos los que ve haciendo running y suspirando, tía, que suspirar ayuda mucho a olvidar y eso lo sabemos todas las que estamos coladas por alguien que ni nos hace ni puto caso.
Resulta que un día le dice el compañero de EPVA que hace una exposición de murales de sus alumnos contra la violencia de género, y Anastasia que no sabe decir que no pues ahí va aunque en el fondo ella es de las que #nimachistanifeminista y se iría muy contenta de compras con @paulaetxebarría y vota cada vez que puede a @isabeldíazayuso y toda la pesca y todo bien.
La cosa es que allí se encuentra con que sale tamaño cartulina gigante en el mural de los de 2º de ESO bilingües y en los de 3º de PMAR, porque están que lo flipan con ella desde que para la tutoría les saca tarjetas de @psico_mporienta, les deja poner videoclips de Rosalía y les prometió que de regalo de fin de curso los lleva al @BurgerKing y a la piscina de su urbanización.
A ella le da mucha vergüenza y de repente allá que le dicen que nosequién ha comprado to los murales donando el dinerito a la fundación de Ausonia. Evidentemente no hay que pasar el screening de AACCII para ver que el comprador es Cristian Gray y ella, que llevaba toda la película sin morderse el labio, ahí pues se lo revienta y tú, si subes mucho el volumen en ese momento, escuchas cómo se le cae al suelo lo que viene siendo toda la ropa interior.
Cristian la intenta convencer de que vuelva en una comisión de servicios a su instituto, y ella pues tarda lo que tarda una alumna de 4° en sacar el móvil a la salida de clase, en decirle que POR FAVOR CARI POR SUPUESTO QUE SÍ.
Cristian le deja hacer el POAT a su gusto y le regala un ordenador de esos de la Junta con el Guadalinex, la llave del minibús del cole y un inalámbrico de esos del centro sin cobertura del al que nunca se le corta la llamada cada vez que hablas con una familia de esas reguleras para informarles del absentismo.
Hasta ahí #loveisintheair pero claro, él hace cosas chungas como transferirle a su cuenta el presupuesto del departamento de Tecnología o el sueldo de un año del PROA sin ser monitora ni nada o avisarle de que va a comprar todo el MEDAC donde trabaja porque es que le salen los números y le suena que a Imbroda algo le ha pasado.
También le lleva a ver a la antigua orientadora que era Kim Basinguer y ella se raya un taco porque es taco de guapa y le suena que hacía unos informes de fliparlo.
Él quiere hacerlo todo a su manera. Llega el carnaval y le lleva un perchero gigante de los disfraces más monísimos y caros del Amazon Prime (nada de papel celofán ni pinocho ni purpurina del chino), ella se disfraza al final de rollo de Papel Albal y él le dice que si le puede guardar la grapadora en AHÍ abajo y, hombre, al principio duda, pero le falta tiempo para meterse el estuche de los de 1° de ESO con todo el material escolar.
En el recreo hay tensión porque se encuentran con la antigua orientadora/KimBassinger y le dice que ella hacía los IEP mucho más rápido, que si los de PMAR la querían más que a ella, que si Cristian no le puso en todo el curso ni una puñetera guardia de recreo, que si ganó con sus Geniallys cuatro o cinco GlobalTeacherPrizes: movidas, movidas.
Cuando van a irse a ella le han rayado el coche y él pues improvisa y organiza un viaje de estudios en barco a Mallorca (a los alumnos no se les ve porque por lo visto van en otro barco) y así pues alivian la tensión docente, que ya sabéis que en las efemérides se acumula mucha.
Luego que si el otro jefe de estudios se sobrepasa con Anastasia, que si él lo quiere matar, que si le dice que se vaya a vivir con ella, que si se quita las bragas en medio de la cafetería del instituto, que si la presidenta del AMPA aparece en su casa y le amenaza con una pistola, que si Cristian le pide que se casen y ahí la cosa se detiene porque ella se lo quiere pensar.
En ese impasse Cristian tiene una excursión con los de 4º de ESO a Sierra de Cazorla y se estrella el helicóptero que los llevaba allí a él y a la administrativa. En un lapso de 3 minutos, el @MatíasPrats en @antenatresnoticias de allí de Seattle da la noticia de que se ha estrellado, todos muy preocupados y al minuto dicen que los han encontrado mientras de repente Cristian aparece ya por la puerta de su casa un poquito magullado pero nada, en camiseta corta verde de “Por la Educación Pública” y extremadamente guapo para haber estado a punto de morir.
Al final todo queda redondo porque ese mismo día siguiente había convocado un claustro extraordinario y Cristian se viene arriba y le dice a todo el profesorado que se casa con ella, que no puede aguantar más de lo bien que coordina el Proyecto Escuela Espacio de Paz y el Forma Joven, y se la lleva al gimnasio para ponerle el anillo. Previamente Anastasia le tira el café encima a KimBassinger/antigua orientadora que se vuelve a poner un poco pesada y Cristian la echa del instituto y le dice que no falsifique más convocatorias por Séneca y que #hombreyaestábien.
Al final del todo se monta una fiesta gorda con fuegos artificiales y todo porque ya ha salido el Real Decreto de la ESO y Bachillerato.
Fin.
DE NADA
Como cada año, por estas fechas, disfruto muchísimo de esta tradición tan nuestra que rememora la pasión y vocación del orientador interino, de la que destaco a continuación mis tronos preferidos, que con tanta devoción ansío ver por las calles de la capital sevillana en la que estos días me encuentro.
#semanasantaorientadora
#mistronosfavoritos
#lapasióndelorientadorinterino
Aquí van:
Llegada ansiada del orientador interino, al centro que lleva 2 meses con la orientadora de baja.
Primera guardia del interino en la que varios alumnos se tuercen los tobillos subiendo las escaleras y él, pues les echa betadine.
Primer claustro en el que el interino presenta un Genially con algunas nociones del protocolo NEAE y los cambios normativos que condicionan este curso la evaluación, la promoción y la titulación de la ESO.
El interino sujetando una Ruffles en una de las últimas quedadas para tomar unas cañas con sus compañeros de departamento.
El interino saliendo de las evaluaciones con el portátil a cuestas, absolutamente devastado por el total desconocimiento, aún en el 2º trimestre, sobre las NEAE del alumnado (y sus correspondientes medidas) por parte de los equipos docentes.
El interino crucificado por todo el claustro junto con la especialista PT y la maestra AL, después de haber hecho constar en acta por parte de los tutores la necesidad de revisar los PRA, actualizar las adaptaciones del alumnado y potenciar las medidas generales de atención a la diversidad.
El interino reflexionado sobre el sinsentido de la atención a la diversidad en un sistema educativo carente de los recursos, la formación y la sensibilidad necesaria para aplicarla.
El interino al final de su periodo de sustitución, totalmente agotado y sobrepasado por la inabarcable labor que debe afrontar un solo orientador en un instituto con 5 líneas de la ESO, 2 modalidades de Bachillerato, tres FP de grado básico, medio y superior y un aula de educación especial con alumnado TEA.
La directora llorando tras la marcha del orientador interino, con lo apañado que era.
El interino sacándose la plaza de funcionario en la siguiente convocatoria de oposición.
Ayer me dio un flus y terminé viendo #Crepúsculo. Os la cuento porque es la interesante historia de una orientadora que, por movidas con su madre, pide en su petición 1 del concursillo irse al Santiago de la Espada de allí de Minessota, cerca de donde su padre y le dan, estaba claro, así que allá que se planta.
La cosa es que el padre es guardia civil y está siempre como muy preocupado, porque en esa zona hay mucha carretera mala, mucho olivo y mucha criatura del bosque, y eso (y tener una hija orientadora algo guapa) da mucha tensión. Y para que ella vaya al instituto sin cargar todos los protocolos en la mochila, y el WISC V y toda la pesca, le regala una camioneta que consigue en el Wallapop de allí de Minessota, le pone ruedas nuevas del Aurgi porque allí hay muchos charcos y barrancos y jabalises, y mira, fenomenal.
En el instituto los compañeros del claustro son un poquito anodinos tirando a gilipollas, pero en fin, ella disimula como puede que, tanto la vida como ese pueblo, le parecen un verdadero mojón, y por eso tiene los ojos así como caídos toda la película.
Pero la movida que le da vidilla es que tiene un PMAR con 5 muchach@s guapísimos que han agotado to las permanencias y ahí se sospecha que el inspector los ha traído de la ESPA, pero nadie protesta ni nada porque son un poco así como adoptados y de incorporación tardía y además, son extremadamente guapos tía, que todo hay que decirlo. El PMAR pues lo típico, muy poco integrados con el grupo de referencia, cada cual más rarito, todos muy blancos de piel, no quieren salir nunca al patio, ni desayunar, pero bah, hasta ahí todo tirando a normal.
Ella revisa el censo y se da cuenta de que hay que actualizarle el informe al más atractivo de los pemares. Y, aunque al principio él se pone muy tonto para salir del aula con ella y eso, al final colabora y todo fenomenal. Pero claro, ella al buscar los percentiles del RAVEN va observando así como que le cambian los ojos de color, que si corre más rápido que Usain Bolt en una fiesta de los Ketama, que si es hipersensible a los olores, que si sigue una dieta estricta, que si tiene la piel muy fría, que si para furgonetas con un brazo, bah pero tirando todo a normal.
Un día, la orientadora acompaña a la de Lengua y la de Plástica (que se rumorea que entraron por la bolsa COVID o por el cupo de discapacidad) a comprar un vestido para la comida de Navidad del instituto, y en un ataque de hastío en mitad del Zara, pues se pira a la papelería a comprar forritos y un libro de mandalas y a la vuelta unos niños de la FPB más chunga de mecánica la acorralan, le dicen que la quieren poner mirando a Michigan, y allá que sale Eduard Cullen con el coche a salvarla.
A partir de ahí todo es un movidón de sentimientos que quieren reprimir porque lo suyo es imposible y además todo el pueblo está muy removido porque hay jabalises muy locos que atacan a la gente. Y el guardia civil, claro, cada vez con más estrés.
A pesar de que la coordinadora de coeducación no ve este amor con buenos ojos (que Eduard Cullen se controla pero siempre está como a punto de pillarse unos enfados que flipas) al final se lían la manta a la cabeza y se hacen novios. El claustro patidifuso, el guardia civil no sabe dónde meterse y al final todos contentos porque los de PMAR cazan a los jabalises chungos después de una Gimkhana que organiza el padre adoptivo con el departamento de educación física y los ciclos formativos de guarda forestal.
Y el inspector aprueba una séptima permanencia extraordinaria de los pmares porque tía, es que qué guapos son.
Crepúsculo.
La orientadora sin alegría de vivir.
El guardia civil padre de la orientadora.
La orientadora con la camioneta llena de WISC cincos, protocolos NEAE, carpetas de tutoría y cuadernillos de OAP de la Junta de Andalucía (mascarillas no, porque en aquel entonces no había aún COVID).
El claustro.
El PMAR.
El del PMAR parando furgonetas con el brazo.
La orientadora acompañando a la de Plástica y Lengua al Zara.
La gimkhana del bosque en la que se lía.
Lo que la coordinadora de Coeducación no quería que pasase.
Pues me he marcado el despropósito de ver el documental de #SoyGeorgina y, aunque no me patrocine @netflixes os hago el resumencito.
Georgina era una chica de a pie que trabajaba en actividades extraescolares y #Netflix explica así sin intentar aparentarlo, lo humilde que es, el buen corazón que tiene y lo poco pija que se ha vuelto al convertirse poco a poco, por méritos propios en inspectora de educación con 28 años de edad.
La cosa es que te va contando que en su pasado ella lo pasó regulinchi, que si en el colegio de monjas no le dejaban leer a Kant, que si en su pueblo no podía hablar con nadie de la insoportable levedad del ser, que si sus compañeras de ballet no distinguían a Beethoven de Mozart, que si MOVIDAS, MOVIDAS.
Total que Georgina se cansa de su vida vacía y se va a Madrid, empieza a dar clases particulares cobrando una miseria pero de repente conoce y se enamora del Ministro de Educación y ahí empieza su carrera meteórica hacia la enseñanza.
Georgina empieza a estudiar mucho porque el Ministro es muy de citar a Ortega y Gasset y ella a veces se pierde. Él va mucho a la biblioteca y ella pues también, y de paso pues se matricula en la UNED y en la UNIR, y en la VIU y en todos los cursos del CEP que puede y en tres o cuatro academias, porque descubre que lo que ella siempre había querido ser es orientadora y allá que va. Se aprende el Decreto 327 como el padre nuestro que rezaba por lo visto en la basílica de Jaca. Y mientras tanto el ministro le regala muchos bolsos de Hermés porque son en los que mejor cabe el BOE y los anexos de la programación que va sacando de @orientacionandujar. A ella se le ve cómo se mete en las papelerías a comprar subrayadores y sale con 14 agendas, 5 típex, 7 bolis @bic y postits para forrar el Congreso de los Diputados, pero es que ella piensa en estudiar y se le va la pinza, como buena opositora.
Durante todo el proceso, a ella nunca le falta un pepino en la cara o un bocadillo de chorizo entre las manos, que el chorizo es muy bueno para memorizar y eso Georgina lo sabe perfectamente. Y a los hijos los ve poquito pero los menta mucho, porque si algo lleva dentro además de su afán por la cultura es el amor hacia los suyos y los demás.
A todo esto, el único día que descansa de estudiar va a un centro específico a ayudar a los niños con NEE a repasar puntitos, distinguir triángulos de cuadrados y unir las zanahorias con los conejos y todo eso, mientras los niños le dicen que es muy guapa y que por favor cuándo va a ir su novio el ministro a verles, que eso les haría más ilusión que subir 20 puntos en el WISC en la revisión de su IEP.
Al final Georgina se saca la oposición y disfruta muchísimo su vida de interina, porque su novio le deja usar el Citröen ZX que ya casi no cogía, y sus amigos la quieren tanto que, aunque la manden al pueblo con la carretera más chunga de la sierra de Jaén, solo haya un Spar y no haya calefacción ni WIFI, ahí que se plantan a visitarla todos los fines de semana.
Y es que Georgina en belleza y cultura yo no sé, yo no sé, pero en amor, cubre todo el baremo de oposición. Y así sí que se llega a donde sea que uno quiera.
Hoy os tengo que comentar esa gran película en la que Nicole Kidman era madre de dos niños, en pandemia, y claro, a Nicole le abrieron el protocolo de absentismo porque se acercaba Navidad y no quería que sus hijos le cogieran COVID.
Nicole era de esas que limpiaba la compra mejor que Margarita del Val, y al principio les rociaba con alcohol en flis flis del Mercadona, les apretaba la mascarilla a muerte, les ponía un litro de flus flus en la mochila, les metía en la bañera nada más llegar del cole y les decía cada mañana: DEIVID NI SE TE OCURRA ACERCARTE A LOS NIÑOS QUE TIENEN MOCOS O TOSEN QUE LAS UCI SE ESTÁN VOLVIENDO A LLENAR Y HAY QUE IR A VER A TU ABUELA Y NO QUEREMOS MATARLA, VALE DEIVID?
Pero la niña era muy rebelde, Carolain le cogía el móvil por la noche para colgar en Instagram tictocs perreando con las estatuas del cuarto de arriba, en clase siempre dejaba la nariz por fuera de la mascarilla y en los recreos se arrejuntaba sin ni distancia social ni nada con todos los de FPB, así que no me quedó más remedio a Nicol que ponerle una mascarilla así entera, que le cubría toda la cabeza (como ella había visto que hacía un youtuber hipocondríaco de Wuhan de esos que eran capaces de fabricar EPIs con una bolsa de basura y un trocillo chico de celo).
Y con la niña no había manera, la niña le mataba a disgustos trayendo suspensas todas menos EPVA (porque montaba unas marionetas con palos de helado que quitaba el sentío) y Deivid tenia ACS en todas y a la mínima chupaba todos los bolis que se encontraba, restregaba su bollicao por los picaportes y todos los días traía la mascarilla de un compañero nuevo, así que Nicol se mosqueó, dijo ALAMIERDALCOLEGIO Y ALAMIERDALOSNIÑO y echó el cerrojo de todas las puertas (con un llavero con el que se podía hacer crosfit de lo gordo que era no me digáis que no).
Porque además a Nicol (que la habían vacunado con Astrazéneca hacía la friolera de 9 MESES) no le funcionaba la aplicación de @SaludResponde y no podía pedir cita para la 3ª dosis y Nicol estaba peleada con el marido (que hacía mucho que no lo veía por casa, pero claro, la casa era muy grande y eso tampoco era tan raro), en la casa el wifi no funcionaba y Nicol pensaba en 10 días confinada con su marío sin @netflix ni @amazonprime y se quería tirar por la ventana.
Así que nada. Nicol súper enfadada, los niños castigaos, el protocolo de absentismo abierto, la hoja SIMIA por si acaso se la hacen también y allá que llega la asistenta de servicios sociales a decirle a Nicol que igual se le había ido un poco la pinza, porque es que ni los niños comían, ni hablaban con gente, ni ventilaba la casa ni nada de nada. El marío aparece con un poquillo de mal cuerpo, nada, unas decimillas, pero cuando ya pierde el olfato y el gusto decide irse a la farmacia a comprar un antígenos.
Al final todos mueren en la cola de urgencias esperando la PCR por ser contacto estrecho.
Perdón por el spoiler de lo que os espera a algunos estos días.
De nada
Los niño abrazando a Nicol
Nicol apicándole a Deivid su ACS
La mascarilla de Carolain
Nicol escuchando a Fernando Simón
He decidido ganarme un par de puntos para la zona VIP del infierno contándoos mi crítica a #nineperfectstrangers de @amazonprimevideo (que todavía no me patrocina pero está a tiempo) porque no tiene desperdicio y educativa es un rato.
Nicole Kidman es una orientadora al uso, en un centro específico que mezcla unas poquitas NEAE así a lo loco, y que barato no es, que ahí con el presupuesto del desayuno matinal se pagan planes SYGA para aproximadamente toda Sudamérica (sin contar que en la despensa hay más sustancias que en el Tour de Francia, las Barranquillas y el Space juntos). El caso es que tiene ahí un aula específica con muchas movidas, y ella, que se hizo el CAP en Rusia y la carrera por la UNED, pues se lía la manta a la cabeza y dice: aquí todos a modalidad B cómo que yo me llamo Nicol Kidman (que no se llama Nicol Kidman que se llama Masha y yo no puedo dejar de acordarme de Masha y el oso que se lo puse un tiempo a mi hijo en YouTube y menudo coñazo).
De lo que tampoco logro olvidarme hasta el capítulo 7 (tiene en total 8 ), es de que Nicol se pasa toda la serie con el pelo sucio, o demasiado rubio y limpio, o mojado para que parezca informal y joven y enigmática como un unicornio (OS JURO QUE LO DEL UNICORNIO LO DICEN), y tú te preguntas toda la serie: Nicol por dios qué tienes en la cabeza??. De las orejas no os puedo hablar porque no entiendo de verdad cómo Nicol, que la coordinadora de igualdad me perdone, ha ido mucho al cirujano, y NO LE HA DADO AL CIRUJANO POR CORTARLE UN TROCILLO POR DIOS SANTO. Pero bueno, a lo que íbamos. Nicol es de Rusia y por eso habla raro. Nicol estuvo muerta y por eso también habla raro. Y luego Nicol tuvo una época de follar mucho y eso aún no se le ha pasado porque se acuesta con el Jefe de Estudios y a la Secretaria también le da. Pero el aula específica se le va de las manos porque el centro es caro pero PTIS hay pocas, mucho campo y acantilado y sauna y piscina y árboles centenarios y hasta cabras, pero más recorte de personal que en la Junta de Andalucía y claro, ahí hay movida.
Hay una con TGC que le ataca por Nosequé de que se folló a su marido (menudo chocholoco Nicol) y ella ni llama al EOEE ni nada, con disciplina positiva y un tiempo fuera lo arregla todo. Entre tanto los desayunos al aula específica les sacan pafuera todas las NEAE y alguno se enamora, otros ven a su hijo muerto, otro cuyo marido quiere hacerle un RickyMartin acepta al final comprarse un hijo y algún otro drama más. Al final el inspector viene, pero llega ya cuando a Nicol le ha dado tiempo a demostrar lo buena actriz que es y que por el capítulo 8 le perdonas todo ese rollo Esperanza Gracia, todos los vestidos entre C&A y HossIntropía, hablar raro toda la serie y que los niños del aula estén siempre a punto como de matarse. El inspector se mosquea porque no tiene los informes hechos, las actas del DO sin firmar y se había dejado en la cocina algo al fuego, pero les pregunta a todos y todos responden que Nicol es la mejor orientadora que se puede tener y que a muerte con ella, que el metilfenidato y los trinaranjus saben mucho mejor desde que van allí y que no la expedienten por favor.
Al final Nicol gana, Rusia 3 points y no cierran el aula. Todos a modalidad B y el AMPA le regala un coche.
@amazonprimevideo de nada.
He visto esta cosa tan absurda y ahora no puedo dejar de pensar que Francesca era una maestra jubilada de PT de un CPR, a la que le viene un ex distribuidor de cuadernillos rubio que ahora tiene una pequeña papelería en un diminuto pueblo de Ocklahoma, donde murió su mujer (maestra también pero AL, de la primera promoción de aeles que hubo al este del condado de Missouri), atropellada por un autobús escolar cuyo conductor estaba ebrio y, además, era interino (un drama).
Francesca erre que erre que no quiere ningún libro, ni cartulinas, ni subrayadores, ni sellos con caritas sonrientes, ni plastilina ni nada, pero al final le invita a pasar porque Robert antes de trabajar para de @teaediciones_oficial estuvo mucho tiempo intentando sacarse las oposiciones de bombero y eso hizo mucha mella en cómo le quedaban las camisetas a cuadros y, contra eso, Francesca no pudo luchar, que Francesca estaba casada con un coordinador de huertos escolares que cada año renunciaba a jubilarse porque todos los puentes de la Constitución lo invitaban de viaje de estudios a Sierra Snowed, y la tenía abandonadita.
Francesca sufre mucho porque ella siempre se ha tomado los programas específicos muy en serio, y esta movida que le pasa le parece un programa demasiado específico que no sabe ni cómo meter en Séneca ni nada. Que Francesca se pone tan nerviosa que se va a comprar una bata de esas de trabajo de PT de aula específica, y se hace la picha un lío y termina con un vestidaco de lentejuelas nivel que consigues que te presten atención hasta los de FPB de electricidad.
(Total, al final se enamoran como para que a Francesca le apruebe el inspector la flexibilización al divorcio de forma inmediata, el marido llega que el pobre no se ha enterado de nada aunque Francesca llora lavando los platos disimulando como la que corta cebollas sin cortar cebollas ni nada, Robert le espera en el coche dispuesto a hacerle la mejor ACAI de profundización que le han hecho en la vida, pero a Francesca, abandonar a su marido le da más pena que irse de excursión sin los niños del aula específica y no encuentra ni PRA ni AC significativa ni nada que le dé el valor de abrir la puerta y correr hacia su felicidad.
En esa escena llora hasta el jefe de estudios del peor centro de compensatoria de La Línea y pues eso, MÀS DRAMA que un destino definitivo en Santiago de la Espada.
La foto es de los Puentes de Madison (no de la Constitución).